
Los bollos suizos son de origen madrileño. Se hicieron populares durante el s.XIX gracias al Café Suizo de Madrid. Un local donde se servían acompañando el café o el chocolate en los desayunos y meriendas. Es una receta relativamente sencilla pero que lleva su tiempo para que la masa fermente correctamente y queden súper esponjosos.
Ingredientes para hacer los bollos suizos
- 500 g de harina de fuerza
- 160 ml de leche
- 75 g de azúcar
- 4 huevos medianos ó 3 grandes (180-190 g de huevo en total)
- 110 g de mantequilla
- 30-35 g de levadura fresca
- 1 pizca de sal
- 1 huevo (para pintar los bollos)
- 50 g de azúcar (para decorar al hornear)
Preparación de los bollos suizos
Si tenemos un robot de cocina o una amasadora nos facilitará bastante la tarea de preparación de la masa. Sino siempre podemos hacerlos a mano como toda la vida se han hecho.
Lo primero que tenemos que hacer para elaborar los bollos suizos es mezclar y templar la leche y la mantequilla para que se deshaga bien el azúcar. A 37ºC es una temperatura adecuada.

El siguiente paso es añadir los huevos y la levadura fresca y mezclarlo todo.

Ahora es el turno de la harina. Le añadimos a la mezcla la mitad, unos 250 g aproximadamente. Lo mezclamos enérgicamente o con el robot.

Después añadimos el resto, los otros 250 g y lo dejamos amasando unos 4 minutos. Cuando termine de amasar dejamos la masa bien tapada en un lugar sin corrientes (el horno apagado es un buen sitio) y dejamos que la masa doble su volumen. El tiempo depende de la temperatura de la estancia, pero en una hora habrá doblado el tamaño.
Cuando transcurra la hora y ya haya doblado la masa la pasaremos a una superficie enharinada y la amasaremos suavemente para que se vaya el aire del interior de la masa.

La hacemos una bola o un chorizo y vamos cortando trozos de unos 40 g para bolearlos. Los ponemos en una fuente de horno con un papel vegetal y los dejamos tapados que doblen su tamaño de nuevo. Esto nos llevará unos 30-40 minutos más.

Cuando las bolas hayan doblado su tamaño precalentamos el horno a 250ºC con calor arriba y abajo. Pintaremos los bollos suizos con un pincel y huevo batido. En la parte superior pondremos azúcar blanca humedecida. Se puede hacer de dos formas, la podemos poner tal cual sobre el bollo o podemos hacer un pequeño corte a la masa con una cuchilla y poner ahí el azúcar humedecida.

Metemos los bollos suizos al horno en altura media y los dejamos 7-8 minutos. Cuando estén listos los sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla sin el papel vegetal.
Una vez fríos sólo queda disfrutar de los bollos suizos acompañados de un café, un té o un rico chocolate a la taza. Un plan redondo para un desayuno o una merienda.
