Llega la primavera y con ella nuevos productos de temporada. En La Sopa Boba, Fernando Limón prepara platos deliciosos. Cada vez que le visitamos quedamos maravillados. La combinación de sabores, sus matices y su imaginación a la hora de cocinar convierten a Fernando en un genio de la cocina. La Sopa Boba es un restaurante único en Madrid y cada experiencia es diferente y siempre agradable. El trato magnífico.
Lo mejor de todo es que Fernando siempre está evolucionando, su cabeza funciona a diario para idear nuevas propuestas y hacer viajar a sus comensales a través de los sabores y las texturas por el mundo de la gastronomía.
Una de las cosas que más me gustan de este restaurante es que siempre tiene platos fuera de carta y lo mejor, sin duda alguna, es dejarse sorprender. En esta ocasión probamos cuatro platos y, salvo la anguila, los demás estaban fuera de carta. El orden de presentación fue ideal, del sabor más suave y matices más sutiles al sabor más potente.
Ensalada de pez mantequilla
Una ensalada ligera y rica. El pez mantequilla marinado es suave y se deshace en la boca. La quinua, la fruta liofilizada y las semillas (gogi, sésamo…) le dan el toque crujiente. Los brotes le dan el toque verde. La acidez que aporta la gelatina muy interesante.
Anguila Teriyaki con gelatina de mango y virutas de foie y kimchi de callos
Un plato redondo. La presentación en tan bonita que te da pena comerlo. Lo mejor tomar un bocado que tenga de todo un poco. La anguila está decorada con perlas de arroz que le aportan una crujiente sorpresa. La combinación de sabores es estupenda, es un mar-aire-tierra. El foie le aporta el toque graso justo y queda un regusto estupendo. Los callos son pura textura. la gelatina da frescor y ese punto dulce. Los filamentos de Ito Togarashi (filamentos de chili liofilizados) le aportan un puntito picante que es muy agradable.
Giozas de gambas al ajillo
Un plato de nuestra gastronomía pero con una vuelta de hoja. Están buenísimas, es un bocado intenso y la salsa dulce que acompaña le da esa chispa que se enciende en tu cerebro. Nada como darle una vuelta a los platos tradicionales para sorprender un paladar.
Salteado de setas Colmenillas y Perrechicos
Como se suele decir si todo lo demás estaba bueno este plato estaba para caerse en la cazuela y ponerse fino. Espectaculares, un sabor intenso a monte, a primavera. La salsa de toma pan y moja. Y nada mejor que mojar con el pan de Madre Hizo Pan. Y es que el mejor pan que he probado aquí lo hacen en la sierra de Madrid.
Para maridar los platos elegimos un vino blanco. Probamos Chass, un vino blanco que nos recomendaron. Vaya descubrimiento! Cuando lo olí su aroma me teletransportó a las sidrerías del País Vasco. Un vino blanco diferente, sorprendente que merece la pena probar y que seguro repetiremos.
No puede haber comida sin un postre y los postres en La Sopa Boba son riquísimos y la carta es muy variada.
La maceta de chocolate en texturas con salsa de mango
Es un clásico que a los amantes del chocolate les encantará igual que me encanta a mí. El punto ácido de la salsa de mango de la regadera combina de maravilla con el chocolate. Las flores también son comestibles. Es muy divertido regar la maceta y después tomar la cucharada del fondo hacia arriba.
Sopa de cereza
Una sopa de cereza con un sabor intenso a cereza. En el centro una bola de helado de vainilla. Combinado muy rico, buenísimo.
Para terminar un café con leche y unas copitas. Y es que en La Sopa Boba preparan unos gin&tonic… bueno, la imagen lo dice todo. Un brindis por La Sopa Boba.
Fernando Limón nunca deja de sorprender con sus recetas, una forma diferente, interactiva y 100% original de disfrutar de la gastronomía.
Hasta pronto!